—¿Estás firmemente decidida? . —Por completo. . —Yo, en tu lugar, aún lo pensaría más. Madrid ofrece grandes posibilidades. . —No me ofreció ninguna. He buscado incansable una ocupación, ya no me interesa. Tres meses de verano pasan pronto y me agrada salir de este asadero. . —Yo te ofrezco una oportunidad. . Isabel Viñole contempló agradecida el rostro atractivo de Arturo Sanromán, su eterno enamorado.